Frente a una lesión de plexo braquial, el paciente perderá la movilidad y sensibilidad de la extremidad, pudiendo ser variable en cuanto a las áreas comprometidas y la severidad, con distintos niveles de dolor.
En relación a las áreas comprometidas, lo más habitual es que se vean afectados los nervios y músculos del hombro (lesión de C5), codo (C6-C7) y con menor frecuencia la mano (C7-C8-T1). De acuerdo a los segmentos de nervios comprometidos, encontraremos variados patrones y combinaciones de lesiones, siendo la más compleja la lesión total, donde existe daño de las 5 raíces del plexo braquial, con la pérdida de función de toda la extremidad.
De acuerdo a la severidad de la lesión, el paciente podrá presentar desde sólo falta de fuerza (paresia) de una articulación hasta la pérdida completa de movilidad (plejia) de un segmento.
Respecto al compromiso sensitivo, la lesión de los nervios del plexo generará la pérdida de la sensibilidad de las distintas regiones de la extremidad según los nervios comprometidos. De acuerdo a la severidad de la lesión, podrá existir desde un adormecimiento (hipostesia) hasta la ausencia completa de sensibilidad (anestesia).
Es frecuente encontrar distintos grados de dolor, el cual no sólo se encuentra en el sitio de la lesión (cuello u hombro) sino que tiende a irradiarse a la extremidad, el cual tendrá un carácter particular, siendo denominado “dolor neuropático”, con sensaciones quemantes e irritativas, asociadas a hormigueo o alteraciones de sensibilidad, que requerirá de un tratamiento analgésico específico.